Andreu Mateu

Hola,   Me llamo Andreu Mateu (Reus, Tarragona, 1962), y escribo esas líneas yo mismo para no caer en la tentación  de escribir en tercera persona cuando en realidad lo he escrito yo. Intentaré ser honesto. Empecemos. Soy  Licenciado en Ciencias Empresariales y Máster en Dirección de Empresas por ESADE.

Dicen que soy un aventurero, porque he llevado a cabo varios viajes y aventuras por el mundo, pero más que un Indiana Jones,  me siento como una persona que, con unas capacidades corrientes, con una gran curiosidad y con grandes sueños  le gusta marcarse «sueños y retos que, a veces, parecen imposibles».

Mi vida ha  ido por varios senderos diferentes pero siempre, con una misma manera de pensar y actuar que ser resume en buscar dentro de ti  tu auténtico sueño, ponerlo por escrito, preparar un plan y poner toda la ilusión y el entusiasmo para hacer aquel sueño realidad.

Soy un gran aprendiz. Me encanta aprender.  Creo que siempre seré un aprendiz de muchas cosas.

Soy librepensador, racional, escéptico, pro ciencia, me lo cuestiono todo y no  creo  ni en lo verificable o lo que pasa el filtro del sentido común y la lógica. No creo en verdades absolutas.  Cuando no sé o no entiendo algo, me gusta decir  «No lo se» y sigo abierto a todo y en todos los campos, pero antes grandes afirmaciones quiero ver grandes pruebas.

En mi lista de valores la justicia, la verdad y la libertad ocupan las tres primeras posiciones. Detesto las injusticias, las mentiras y la falta de libertad, porque son ataques frontales a lo que considero buenos valores. Y soy de los que levanta la voz para denunciar los ataques directos a esos valores, por lo que para los que conviven cómodamente ante las injusticias, las mentiras y la falta de libertad, soy un radical.

Acostumbro a llevar la contraria y cuestionar valores,  creencias,  modas, costumbres y tradiciones,  cuando pienso que son contrarias a esos valores ( justicia, verdad y libertad) y al buen progreso de la humanidad.

Desde mi juventud, mi vida ha sido dirigida por  mi brújula interior: mis sueños.  No consigo todo lo que me propongo pero sí que voy con la mentalidad de que, algunas veces, gano y muchas otras, aprendo.

Uno de mis lemas favoritos  es “Nunca sabrás de lo que eres capaz de hacer hasta que no lo intentas”.

Mi primer gran sueño fue sacarme la carrera de Ciencias Empresariales y Máster en Dirección de Empresas en ESADE..

En mis últimos años de carrera empecé a organizar mi siguiente gran sueño que era ir a estudiar un Business Case Program en la Universidad de Harvard , para luego recorrer EE.UU. con una mochila y, finalmente, llegar a Nueva York, encontrar un trabajo en aquella ciudad y quedarme a vivir allí un año.

Mi carrera profesional empezó yendo a saludar al director de la Cámara de Comercio Española (Spain-US Chamber of Commerce) de Nueva York en el Empire State Building, al salir de la reunión me puse a charlar con la gente que había por allí, me puse a ayudarles a mover unas cajas de una mudanza, después vi una mesa vacía, la ocupé, nadie me dijo nada, al día siguiente volví y allí creé mi primer centro con mesa y teléfono, plataforma que me sirvió, para buscar un trabajo remunerado en Nueva York.

De allí pasé a trabajar a la Barcelona Development y luego vino mi trabajo en la Oficina Comercial de España en Nueva York, como Subdirector del Departamento de Productos Industriales.

En 1992 decidí dejarlo todo para lanzarme a viajar a los lugares más remotos del planeta utilizando todo tipo de medios de transporte conocidos. A mi proyecto le llamé The Transcovery Project. En aquella época, trabajaba en la Oficina Comercial de la Embajada de España en Nueva York. Y para hacer realidad mi ambiciosa aventura, tuve que poner a la venta todas mis posesiones y cogí una parte de un dinero que había recibido de la herencia de mi padre y que pensé que lo mejor que podía hacer era invertirlo en mi educación.

El 11 de agosto de 1992, me subí a un par de patines en línea, dando comienzo a mi aventura. En total, dediqué tres años de mi vida a esta expedición, recorrí 120 países y utilicé 130 diferentes medios de transporte. A mi regreso publique dos libros.

Luego monté una empresa y doce años después, en 2007, me embarqué en un nuevo proyecto: cruzar el Atlántico a remo y en solitario a bordo de un pequeño bote de madera. Permanecí 94 días en alta mar y finalmente alcancé la isla de Martinica en el Caribe, convirtiéndome en el primer español en cruzar el Atlántico a remo y en solitario y por el que me dieron el Premio Internacional a la hazaña del año.

Desde 1995, dirijo Dreams & Adventures, una empresa de actividades de Team Building y Outdoor Training desde la que puedo organizar eventos motivacionales en cualquier lugar del mundo.

A través de los años, me he dado cuenta de que lo que me gusta, es soñar, luego, convertir esos sueños en objetivos, enfrentarme a mis miedos, emprender, aventurarme en lo desconocido, superar mis metas, analizar las experiencias vividas y destilar aprendizajes.

También  me gusta aislarme de los pensamientos generalizados, pensar por mí mismo , intentar ser sincero y, si lo estimo necesario, ir en sentido contrario y por el camino, explicar el porque a los que me preguntan porque no sigo el camino de todo el mundo. Cosa que, a veces,  me lleva a provocar, despertar mentes, y hacer pensar a los que no han tenido esa oportunidad de pararse y ponerse a pensar por si mismos..

Muchas veces me han dicho que estoy loco, pero también que estoy muy cuerdo.  Y lo de loco lo interpreto como un halago, porque mi locura no es más que el atrevimiento a hacer cosas que  algunas personas jamás se han atrevido ni a soñar.

Como todo el mundo, tengo que trabajar para pagar los viajes, la hipoteca, la luz, el agua, el pan y mis caprichos y eso lo consigo a base de contribuir y aportar, en lo que puedo, valor a la sociedad, inspirando, formando y motivando a las personas, para sacar lo mejor de si mismos y animarles a conseguir resultados extraordinarios. Los eventos de Teambuilding, los libros, las conferencias son  el canal y el medio de cómo llego a las personas.

En fin, he vivido la vida que soñé, y sigo viviendo diversas aventuras que a cada equis años me voy inventando, y me siento un afortunado,  porque a pesar de que tengo días muy buenos, días buenos y días no tan buenos, para ser feliz, sólo necesito proyectos que me tengan apasionado.

Mi ultimo proyecto. Convertirme en músico. Estoy el ello. Me apasiona la música y la influencia que con ella se puede ejercer en el espíritu de las personas.